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Por Julio de la Torre
Si existe una actitud recurrente en estos momentos entre los empresarios, emprendedores y profesionales es la que se expresa de la siguiente manera: “Estoy harto”.
El hartazgo es un sentimiento que proviene de una emoción primaria que es el asco, generado hace miles de años por nuestro cerebro más primitivo para defenderse de la ingesta de un alimento que podía envenenarle y acabar con la vida de su cuerpo, el instinto de supervivencia desarrolló y perfeccionó esta inteligencia básica que todos tenemos.
¿De que estamos hartos? Es una gran pregunta, pero lo que está claro es que existen muchos factores que convergen en unos pocos y en los que nos encontramos todos inmersos y, el principal es, o lo podemos resumir como “esta situación”, una manera muy maximalista de definir el objeto de nuestra hartura.
El hartazgo nos produce cansancio, desesperanza, apatía, es como la corrosiva herrumbre o la humedad, que lo acaba pudriendo todo generando un entorno crítico vital.
El sistema se está corroyendo y nuestra vida con ello o viceversa.
En este entorno crítico podemos definir las siguientes líneas de desarrollo:
1.- Rechazar la situación y luchar contra ella, cortando por lo sano cada vez que aparece sin poner remedio a las causas y sólo combatir sus efectos una y otra vez cuando van surgiendo. Es como no arreglar el tejado entero y sólo reparar las goteras cuando aparecen. Ser fontanero.
2.- Rendirnos y abdicar y hacernos partícipes del proceso, ser corrosivos.
3.-Aceptar, es decir, tomar conciencia de lo que ocurre a nivel personal y social y tomar acción sobre las causas, admitiendo los efectos que se producen, como en la primera opción pero con el matiz de que voy a levantar todo el tejado. Ser ingeniero.
Aplicado a nuestra vida, las tres líneas pueden coexistir y en mayor o menor medida protagonizar partes de nuestra vida, es decir, todos hemos sido y somos corrosivos, fontaneros e ingenieros.
El 9 de febrero de 2021 comienza un curso Salir a flote con audacia en entornos críticos en el que vamos a aprender a relacionarnos con estas situaciones y muchas otras.
En este curso aprenderemos cómo manejar el hartazgo, el hastío, el cansancio, la falta de ganas, y todo empieza por una palabra: “SÍ”. Ni más, ni menos.
Sí, estoy harto. Aceptar la situación. Desde ahí comenzaremos a tapar goteras y diseñar un nuevo tejado.
Para alcanzar esta situación de Aceptación Operativa, es decir, la que se diferencia claramente de la resignación, es necesaria una predisposición por tu parte pero también una serie de conocimientos que tienes que adquirir, pues tu y yo, reconócelo, sabemos poco de ”tejados”, y tenemos que aprender. Por eso es necesario formarse y realizar cursos y adquirir conocimientos.
La buena noticia es que este proceso de aprendizaje es netamente experiencial y aprendemos haciendo, pues no se trata de un constructo teórico contenido en sesudos estudios, se basa en la experiencia de quienes están o han pasado por situaciones similares y quieren compartir y acompañar con otros su sabiduría.
Tú puedes, pero no solo. Esa es la clave, por eso nos hemos unido en GROWPATH para que no lo estés.
Si quieres emprender un camino acompañado te espero, no iremos más deprisa, pero seguro que llegaremos más lejos.
Te dejo mi dirección web: JULIODELATORRE.ES
Siempre Adelante.
